"Calladitos somos más bonitos": Denuncian hostigamiento de la secretaría de Salud en el hospital de Quequén

La crisis en Salud en el distrito de Necochea se agrava diariamente, con una clara intención del gobierno municipal de hacer recortes y presentarlos como una medida de gestión, intentando tapar cualquier acción que perjudique la imagen del intendente con propaganda y, en simultáneo, reiteradas amenazas contra el personal frente a las constantes revelaciones y publicaciones sobre la situación.

Es que a lo largo de la semana diferentes fuentes entre el personal del Hospital José Irurzun de Quequén expresaron en mensajes privados su preocupación por la actitud que tomó la Secretaría de Salud al conocerse primero el cierre de un área tan importante como la de Oncología en el nosocomio quequenense y las intenciones de trasladar a Necochea el área de esterilizaciones. Las fuentes aseguran que viven en un estado de hostigamiento permanente por parte de sus superiores.

Comentando los cierres de servicios, personal del Irurzun entró en contacto con Cuatro Vientos y asegura que "esta situación empeoró". Según la fuente, luego de la nota de Cuatro Vientos sobre el cierre del área de esterilizaciones, "la secretaria de salud se presentó para "dialogar" con el  personal, reprochando la nota de Cuatro Vientos y haciéndole saber que ella podía decidir lo que crea más conveniente (por ejemplo, traslado del personal)".

¿No sería mejor que la secreraria de salud se acercara al  hospital para decir que van  a arreglar los lugares y solucionar los problemas urgentes? ¿O es más fácil tratar de callar a las personas que muestran a la gente las necesidades urgentes del hospital de Quequén?", se preguntó la fuente en nombre del personal del hospital. "Siguen con  el  discurso de querer " centralizar y optimizar " todo en necochea,  vaciando y cerrando servicios y áreas del hospital de Quequén", cerró el mensaje.

Una y otra vez la secretaria de Salud Andrea Perestiuk ha intentado presentar los recortes y cierre de áreas como una "centralización" que busca optimizar servicios que, en realidad, evidentemente restan calidad de atención a los vecinos como resultó claro en el caso de Oncología, que obligará a pacientes en estado delicado a trasladarse a Necochea para recibir tratamiento.

Hostigamiento

Durante la semana la propia secretaria Perestiuk estuvo por el Irurzun celebrando reuniones con el personal, un eufemismo para relatar la intención permanente y obsesión que tiene la gestión Rojas con acallar cualquier clase de "filtración" de información en sus dependencias.

"La misma persona que hostiga a los empleados es la que hacía cantitos contra López al ritmo de bella chao", cuentan las fuentes a Cuatro Vientos. Por lo pronto, el anonimato de las fuentes tiene que ver con la amenaza permanente de la Comuna de tomar acciones contra quienes cuenten lo que sucede en los hospitales, algo que en el pasado le mereció una operación de prensa sobre un robo falso a una empleada y que fue puesta a modo de ejemplo para el resto del personal.

En ese contexto, la secretaria se ha mostrado más preocupada por las filtraciones a la prensa que en resolver el problema. El panorama de recortes está tratando de llevar al mínimo el gasto en el hospital de Quequén y presentar un traslado de servicios que luego tampoco están garantizados, muy a pesar de la propaganda oficial. Los ejemplos de esos recortes se ven en Oncología, que terminaría de cerrarse en diciembre; y el área de esterilizaciones, graficando literalmente la mecánica del ajuste dispuesto por el intendente.

La búsqueda de acallar al personal y lanzar amenazas es una característica de la gestión de Arturo Rojas al frente de la Comuna: empleados de todas las áreas municipales han entrado en contacto con Cuatro Vientos denunciando aprietes sistemáticos, revisión de computadoras y demás movimientos buscando dar con los responsables de las "filtraciones". Eso sí, los problemas reales siguen sin respuesta y la molestia tiene que ver más con una cuestión de imagen del intendente en campaña que por lo grave de la situación.

Esterilización

El caso de las intenciones de cerrar el área de esterilización del Irurzun no sólo muestra el recorte, sino que además revela que la gestión poco y nada se ha interesado en el tema, aún cuando se trata de una necesidad básica para el tratamiento de pacientes de cualquier tipo en el hospital.

En un breve informe realizado por el personal y presentado a Cuatro Vientos, se destaca que hay un "autoclave obsoleto que se usa a falta de otro". 

Con el autoclave actual se esterilizan gasas, vendas, apósitos, gasas odontológicas y traumatológicas, apósitos, guantes, ropa de quirófano, compresas de guardia y sala y todo material de tela, cinta hilera para quirófano, linos para quirófano, etc). El sector esteriliza todo el material que se utiliza en Hospital Irurzun, los numerosos CAPS, Hogar Raimondi y Hospital Taraborelli, además de esterilizar todo el material del Hospital Ferreyra cuando no funcionan los de allí, "lo cual ocurre a menudo, lo que agrega un volumen importante de trabajo", indica el informe

Al momento, aunque el personal ha presentado numerosas notas al Ejecutivo sobre una situación en el área que es preocupante, con máquinas que no andan o quedaron obsoletas por antigüedad y otras que, por sus características y falta de reformas edilicias, se presentan como un riesgo latente que incluso hace peligrar la vida del personal y los pacientes.

La tendencia de la gestión Rojas de ver "operetas" por todos lados (quizá proyectando sobre los demás su propio modus operandi) inmediatamente ha disparado verdaderos operativos de los funcionarios sobre los empleados, aunque no para asistir sobre los problemas reales, sino para contener nuevas filtraciones, que en virtud de los manejos que han caracterizado a Rojas y su equipo en los últimos tres años, no tienen una vía de solución en lo inmediato. Mientras tanto, un virtual vaciamiento del hospital de Quequén está teniendo lugar, en busca de un ahorro y un achicamiento del sistema de salud que no hace más que empeorar la situación mientras se lo mantiene oculto con toneladas de propaganda.