¿Quién controla?: Una moto atropelló a una joven en Pinolandia y le arrancó cuatro dientes
(*) Por Fran Bandini
En horas de la madrugada, una menor de edad fue embestida por un motociclista en la zona de avenida 2 y Pinolandia y le causó heridas de consideración. Entre ellas, la pérdida de cuatro dientes.
Según consta en el reporte policial, la joven caminaba por ese sector de la Villa Balnearia cuando un motociclista la atropelló, generándole una fractura en el antebrazo, una luxación en el tobillo y la pérdida de cuatro dientes. En tanto, el conductor de la moto, de quien no trascendieron mayores detalles, también tuvo que ser hospitalizado tras caer del vehículo después del impacto.
La zona de avenida 2 y Pinolandia es uno de los puntos de mayor conflicto vehicular de la ciudad. En horas de la noche, ese sector se convierte en un autódromo ilegal en el que autos y motos participan de exhibiciones temerarias realizadas por jóvenes –en algunos casos alcoholizados- sin ningún tipo de control policial ni de Tránsito.
Meses atrás, el video de un auto volcado en ese sector expuso la anarquía que se vive allí en horas de la madrugada, aumentando su peligrosidad producto del consumo de alcohol por parte de varios conductores.
Desde el Municipio no se han tomado cartas en el asunto y han preferido evitar que el tema llegue a la agenda. La nutrida cartilla de medios oficialistas que operan en Necochea han callado sistemáticamente sus voces cuando una noticia exponía las deficiencias del Ejecutivo en materia de seguridad.
Desde Cuatro Vientos señalábamos en aquel entonces el uso de las fuerzas de seguridad y organismos municipales de control para hacer campaña. Desde el área de Seguridad municipal montaron operativos inexplicables en lugares que registran alta circulación, pero nula conflictividad, con el objetivo que “sea vea que se está haciendo algo”, pero atendiendo problemas inexistentes.
No obstante, la zona de la rotonda de avenida 2 y Pinolandia reúne cientos de jóvenes con autos y motos que exhiben maniobras sumamente peligrosas a la vista de todos. Esta situación sucede con el aval del Gobierno municipal que, a lo sumo, expone a un acotado grupo de agentes de Tránsito a tener que lidiar con una situación que, a las claras, los supera. Los trabajadores de esa área, totalmente desprotegidos, son a menudo increpados y hasta golpeados por los violentos conductores.
El problema, con tendencia a profundizarse aún más, no parece tener importancia para la gestión de Nueva Necochea, que, prácticamente, regaló a un amigo el Parador Integrador –utilizado como posta policial durante la pandemia- que instaló la Provincia de Buenos Aires allí. Donde antes había agentes de control ahora hay un bar, cuya explotación le significa a José “Cholo” Servat –dueño del emprendimiento- el pago de un cánnon 497mil pesos por 25 años de uso más 7 de prórroga.
Entonces, mientras no exista una política concreta para solucionar los conflictos que se suceden a menudo en la zona de avenida 2 y Pinolandia, continuará la población siendo víctima de las imprudencias que se permiten por omisión. ¿O es que se espera que una tragedia obligue a la acción?
