La Comuna lanzó un comunicado por las paritarias y crece el malestar de los municipales

Las negociaciones salariales paritarias entre la Municipalidad y los tres sindicatos que agrupan a sus empleados ha vuelto a ponerse al rojo vivo en vísperas de un nuevo encuentro entre las partes este jueves.

Si bien los municipales han mostrado buena predisposición al diálogo en el marco de una negociación que ya de por sí la Comuna ha planteado como desfavorable para el personal, desde el Ejecutivo se lanzaron algunas operaciones mediáticas en el pasado que caldearon los ánimos, situación que se coronó con la decisión de la secretaría de Gobierno de suspender las horas extra en distintas áreas.

En aquel momento las conversaciones quedaron pendientes y para este jueves 14-07 está programado un encuentro entre el Ejecutivo y los sindicatos para seguir con las negociaciones, aunque una vez más el uso de los medios y el condicionamiento de la opinión pública fueron los instrumentos que eligió el Ejecutivo para sentarse a la mesa.

Con declaraciones radiales, promesa fallida de conferencia de prensa este mediodía y finalmente un comunicado en la web municipal, la Comuna dio a conocer su oferta de manera capciosa, buscando marcar públicamente la cancha para condicionar una vez más la elección de los representantes de los trabajadores. Este mediodía iba a celebrarse una conferencia de prensa para anunciar la propuesta, pero la tensión creada por la forma que eligió la Comuna hizo que la idea fuera suspendida por temor a que se produjeran incidentes.

Para esta ocasión, el intendente Rojas agregó a los términos de la negociación una promesa que en realidad no está en sus manos: aumentar la cantidad de 30 a 40 horas semanales a un plantel de 200 asalariados municipales de mayor antigüedad en esa categoría. La promesa, aunque fue ingresada a la propuesta, está en realidad condicionada a la votación del Concejo Deliberante en el presupuesto del año entrante, por lo que no se trata de nada concreto que los trabajadores realmente puedan considerar en la actualidad.

La molestia que provocó el ingreso de la protesta (que además fue percibida como "envenenada" porque podría significar planteos al sindicato de los posibles beneficiados) se sumó a la disconformidad que ya viene desde principio de año: todas las propuestas hechas por el Ejecutivo son "no acumulativas", es decir, los incrementos planteados se calculan sobre el salario que percibían los empleados al comenzar el año, por lo que el beneficio real es significativamente menor al que plantea la comuna.

Además, la propuesta presentada tiene un último incremento que corresponde al año que viene, por lo que el anuncio de porcentajes hecho de manera pública es notablemente capcioso y carece del rigor correspondiente a la propuesta.

Los desarreglos y movimientos que ha hecho la Comuna para negociar y condicionar las decisiones de los trabajadores se han ido sumando y la relación entre las partes es más bien tensa, por no decir mala: hay mucho malestar en los municipales por el trato dispensado por la gestión Rojas en los últimos meses.

Carta al intendente

A través de una nota cuyo texto circula en las redes sociales se conoció la postura de al menos una parte de los trabajadores que plantearon una serie de cuestiones vinculadas a los gastos que hace la Comuna para enfrentar sus obligaciones, principalmente reduciendo su planta política.

Sucede que la gestión del intendente Arturo Rojas, lejos de cumplir con las promesas electorales del 2019, ha agrandado ostensiblemente su gasto en funcionarios y en publicidad electoral para su campaña ya con un año y medio de anticipación. 

En campaña, Rojas y su equipo llegaron a acusar a su antecesor de tener más de 100 funcionarios, algo que luego nunca demostró ni incluso teniendo los datos en la mano una vez asumido el mando. Oficialmente lo que terminó pasando fue que Rojas asumió con 49 cargos ocupados por el Ejecutivo de Facundo López y actualmente maneja 75 cargos. Es decir, aumentó un 50% la planta de funcionarios.

En un fragmento de la nota que podés leer en el archivo vinculado se pueden leer las sugerencias para el Jefe Comunal por parte de sus propios empleados:

1. Reducir la planta política.

2. Restringir el ingreso de personal – sin excepción alguna.

3. Analizar gastos presupuestarios, y restringir gastos al mínimo posible

4. Que aquellas vacantes que surgen de empleados que se jubilen, no resulten cubiertas, a efectos de oxigenar el Presupuesto, y poder planificar la redistribución de esos montos en los salarios de los trabajadores.

El malestar creciente de los municipales podría detonar completamente la relación con el Ejecutivo si siguen los manejos de prensa, los condicionantes fuera de protocolo y las promesas dudosas. El destrato dispensado aún está lejos del desastre del 2019 con pagos en cuotas y gas pimienta en el hall del Palacio Municipal, aunque el ritmo inflacionario y la premura de los trabajadores no son compatibles con el gasto que el Ejecutivo hace en su construcción reelectoral.