Municipales en alerta: Dos áreas del hospital con quites y los jardines al borde del paro
Finalmente las negociaciones salariales a la baja prolongadas por varios años en la municipalidad tienen a los trabajadores municipales al borde del estallido, con algunas áreas que están comenzando a protestar con quites de colaboración frente a recortes sin aviso que la gestión del intendente Arturo Rojas les impuso sobre sus bonificaciones.
Las bonificaciones son diferentes ítems dentro del salario de los trabajadores que corresponden a situaciones específicas, como el trabajo nocturno, tareas de riesgo, la manipulación de máquinas específicas o el bloqueo del título en el caso de los profesionales. Sucede que en los últimos meses la Comuna aplicó recortes de esas bonificaciones en distintas áreas, lo que ha hecho brotar el descontento.
Las áreas de Prevención y de Mantenimiento del hospital municipal grafican actualmente la situación: una veintena de trabajadores de todos los turnos reclaman que hace más de un año que no perciben las bonificaciones, que en vistas de lo atrasados que han quedado los salarios tras cuatro años de negociaciones por debajo de la inflación, representan un monto que hace la diferencia para los trabajadores.
Según se informó a los trabajadores, el mes pasado tenía que haber salido la bonificación, aunque nunca se concretó el pago. La respuesta a los reclamos por parte de Martínez fue que "se complicó" la situación y que supuestamente iba a darse en el cobro de Julio. El mes pasó completo y los empleados no registraron el cobro, por lo que el funcionario volvió a "patear la pelota" para el mes que viene con la promesa de cobrar retroactivas esas bonificaciones.
Si bien el mes pasado el sindicato contuvo los reclamos, el incumplimiento de este mes ha disparado el descontento y tanto en Mantenimiento como en Prevención hay quite de colaboración.
Ante la decisión, la lamentable reacción de los funcionarios a cargo del área de Prevención fue la intimidación a través de mensajes enviados a los trabajadores en protesta, una costumbre de la gestión Rojas para manejar su personal. Para subir aún más la temperatura con atrasos que datan de varios meses y promesas incumplidas, los funcionarios pretendían que los trabajadores no elevaran sus reclamos al sindicato y lo hicieran administrativamente donde, desde luego, no habían encontrado respuesta.
La situación de los trabajadores municipales es preocupante, con salarios muy por debajo de la línea de la pobreza producto de negociaciones en los que la gestión Rojas mantuvo por detrás de la inflación los salarios en cada negociación. Las bonificaciones de entre 15 y 20 mil pesos representan así un importante complemento del salario, que en la gran mayoría de los casos no supera los 100 mil pesos mensuales.
La hipótesis de los trabajadores, que no entienden el recorte, es que hay un gran descuido de las tareas administrativas con respecto al personal por la campaña electoral, que consume los esfuerzos de los funcionarios.
"No se explica que se estén ahorrando 250/300 lucas con esto", se lamentaron en el sindicato. Los salarios están tan atrasados que a situación ha llegado a un límite que puede estallar en cualquier momento. "Hay trabajadores que a gatas llegan a pagar su alquiler y después pueden pensar en comer. Y algunos ni siquiera pueden pagar el alquiler con su trabajo". Para graficar el panorama, el dato: un empleado con 20 años de antigüedad en promedio recibe unos 150 mil pesos
Los jardines al borde del paro
Por su parte, las docentes municipales también están reclamando porque no cobran el incentivo docente. A principios de año las docentes habían plantado una postura muy fuerte y estuvieron al borde de no comenzar el ciclo lectivo si no conseguían la efectivización de ese incentivo.
El incentivo depende de giros de fondos de Nación, algo que en aquellos días no se estaba produciendo. Ante esa situación, el municipio se comprometió a cubrir la suma con "recursos propios", algo que se cumplió solo dos meses y este mes ya directamente fue retirada sin explicaciones. Se trata de 16 mil pesos sobre el salario de docentes de 5 instituciones municipales.
El municipio prometió que recién el mes que viene podrán cobrar en retroactivo esas bonificaciones aunque las trabajadoras no quieren saber nada con ese arreglo. Una de las razones de la molestia es que la gestión ni siquiera avisó a nadie de las quitas, por lo que convocaron a una asamblea en el Sindicato que va camino al paro.
La conflictividad en distintas áreas municipales se viene cultivando hace años: de las promesas del intendente de jerarquizar la posición de los trabajadores sólo queda la sombra y la realidad es que la gestión Rojas ha sido más bien impiadosa con su propia planta de personal, no sólo atrasando notablemente sus ingresos sino además imponiendo un régimen de amenazas y controles con un aparato burocrático de funcionarios más enfocado en sofocar reclamos que en mejorar las prestaciones de servicio del municipio.
