Por un incidente diplomático, China podría exigir que Argentina pague el swap y amenaza con dejar de comprar soja y carne

En un giro diplomático tenso y preocupante, Argentina se encuentra ante la posibilidad de enfrentar duras represalias por parte de China, tras la reunión secreta entre la canciller Diana Mondino y la representante de Taiwán, Miao-hung Hsie. En las últimas horas, trascendió que el gobierno chino evalúa activar el pago del swap, una medida que podría ascender a miles de millones de dólares, sumando intereses que rondan el 6 por ciento.

La activación de este proceso de cobro, que involucra alrededor de 5000 millones de dólares, podría llevar meses, incluso años, debido a la peculiaridad de los tiempos burocráticos en China. Este periodo, quizás, ofrezca al gobierno argentino una ventana para rectificar su postura respecto a China, especialmente en lo que respecta a su política anti China.

Según el portal La Política Online, el encuentro de Mondino con la representante comercial de Taiwán generó malestar no solo en la diplomacia del Palacio San Martín sino también en el ministro de Economía, Luis Caputo, quien busca reactivar el swap para obtener fondos.

Se especula con la posibilidad de que China, como medida de represalia, priorice a Brasil en sus compras de soja y maíz, una decisión que podría tener consecuencias significativas dada la alianza fuerte entre el presidente Lula y el gigante asiático. Por su parte, el gobierno de Milei, recién asumido, anunció su retiro del bloque de los Brics, donde Brasil y China son actores clave.

Ya se observa un cambio en las compras de soja y maíz por parte de China, orientándose cada vez más hacia Brasil. En el último periodo, los embarques de granos brasileños alcanzaron la cifra considerable de 8.79 millones de toneladas, representando más del 40% de las importaciones de estos productos por parte de China.

Además del impacto en la compra de granos, se rumorea que China considera dejar de adquirir carne argentina, optando en su lugar por carne australiana y ganado en pie de Uruguay. También se evalúa suspender las negociaciones para levantar las barreras sanitarias a productos avícolas y la compra de menudencias de carne, iniciadas durante la visita de Sergio Massa a Beijing.

Un posible cierre del mercado chino para la carne argentina sería devastador para la industria, ya que una gran parte de sus exportaciones están destinadas a este gigante asiático.

El pasado 21 de noviembre, la cancillería china advirtió sobre las consecuencias de romper relaciones con países importantes como China y Brasil, refiriéndose a los comentarios del presidente Milei, quien calificó a ambas naciones de "comunistas" y prometió romper relaciones. China y Brasil son los principales socios comerciales de Argentina.

China ha experimentado un crecimiento significativo como socio comercial argentino en los últimos 15 años, proporcionando insumos y maquinaria esenciales para la industria nacional. "Romper relaciones con nuestros principales socios comerciales nos puede llevar a una triple implosión productiva, social y financiera", advierte Sabino Vaca Narvaja, ex embajador argentino en China.

Más del 90% de las exportaciones de soja, el 80% de las exportaciones de carne en agosto del año pasado y alrededor del 60% de mariscos, cebada, sorgo y carne de ave tienen a China como destino. Según datos del Indec, en 2022, las exportaciones argentinas a China ascendieron a 8.015 millones de dólares, representando el 9% del total de comercio exterior del país. En el primer semestre de 2023, se exportaron 2.711 millones de dólares, equivalente al 8,1% del total.

El impacto potencial de estas tensiones diplomáticas se hace evidente en provincias como Jujuy, Catamarca, Chaco, Entre Ríos, La Pampa, Santiago del Estero, San Luis y Formosa, donde China explica hasta el 30% de las exportaciones. Romper relaciones con China podría resultar en la pérdida de millones de puestos de trabajo para los argentinos, según Vaca Narvaja.

Catamarca, por ejemplo, depende en un 45,4% de las exportaciones a China, Jujuy en un 28,52%, Chaco en un 28,29%, Entre Ríos en un 27,6%, Santiago del Estero en un 22,2% y La Pampa en un 20,1%. La delicada situación diplomática actual pone en jaque no solo la economía nacional sino también el sustento de miles de argentinos en diversas provincias.