Balcarceño preso en Batán por asesinar a un bebé armó una banda de “sextorsión”
José Luis Liberti, sentenciado a 18 años de prisión por la brutal muerte de Dylan Stio, un niño de 2 años en Balcarce, ha sido implicado en la siniestra práctica de "sextorsión" desde su celda en la cárcel de Batán. Las autoridades, encabezadas por el fiscal Rodolfo Moure y la SubDDI de Balcarce, han desentrañado una red de extorsiones virtuales de índole sexual, cuyos tentáculos se extienden hasta los confines de la sociedad.
La investigación revela que Liberti operaba con la complicidad de su propia familia y un compañero de celda en la penitenciaría. Este oscuro capítulo comenzó a desplegarse en febrero, cuando un joven de 25 años denunció haber caído víctima de una extorsión perpetrada a través de un ficticio perfil de Facebook bajo el alias "Brenda Díaz".
En una retorcida estratagema, el joven, engañado por este perfil falso, compartió imágenes íntimas y proporcionó su número telefónico. La pesadilla alcanzó su punto álgido cuando recibió una llamada del supuesto "padre de Brenda", quien lo amenazó con denunciarlo alegando que la ficticia "Brenda Díaz" era menor de edad.
Desesperado, el afectado se dirigió a un domicilio en la calle 37, entre 2 y Maipú, donde dos mujeres, identificadas posteriormente como la madre de Liberti, de 63 años, y su hermana, de 24, lo despojaron de la suma de 35 mil pesos y su teléfono móvil, según lo detallado por el portal 0223.
En una operación de allanamiento, los investigadores lograron incautar los teléfonos móviles de las mujeres, ahora bajo custodia, así como el dispositivo del compañero de celda de Liberti, revelando una trama sórdida que se gesta desde las sombras de la penitenciaría. La perturbadora conexión entre un criminal convicto y su incursión en el mundo de la "sextorsión" arroja luz sobre la capacidad de delincuentes para orquestar actividades ilícitas desde el encierro, desafiando incluso los límites de la seguridad penitenciaria.
