Video: Valiente rescate de dos kayakistas en apuros en San Cayetano
San Cayetano vivió un dramático episodio el pasado viernes cuando dos hombres se lanzaron al embravecido mar en sus kayaks, desafiando las adversas condiciones climáticas y marítimas. Lo que se inició como una audaz escapada marítima pronto se transformó en un peligroso incidente que conmovió a la comunidad y movilizó a las autoridades de la Prefectura Naval.
El reloj marcaba el mediodía cuando dos individuos provenientes del Gran Buenos Aires decidieron desafiar a la madre naturaleza y lanzarse al mar en sus pequeñas embarcaciones, a pesar de las advertencias evidentes. El viento desencadenó grandes olas que, propulsadas desde el este, deberían haber disuadido a cualquiera con sentido común. Sin embargo, la emoción de la aventura superó a la prudencia, y ambos hombres se adentraron en el inmenso azul.
La tragedia se desató cuando una colosal ola los golpeó con furia, derribando sus kayaks y sumiéndolos en una lucha desesperada por sobrevivir. Uno de ellos fue arrastrado mar adentro por la corriente, mientras que el otro quedó atrapado entre las imponentes olas. Testigos presenciales, atónitos, observaron la dramática escena y rápidamente se movilizaron en busca de ayuda. Los vecinos de San Cayetano se unieron en un frenesí de preocupación, desesperados por encontrar una embarcación o moto de agua que pudiera prestar asistencia en este momento crítico. Sin embargo, la ayuda que tanto necesitaban no estaba disponible en ese preciso instante en la villa.
Según el relato del periodista tresarroyense Juan Tomalino, se estableció un llamado urgente a las autoridades de San Cayetano y a la Prefectura de Puerto Quequén en busca de auxilio, mientras algunos valientes kayakers intentaron acercarse a los afectados, aunque sus esfuerzos resultaron infructuosos en las aguas agitadas. La tensión en el aire era palpable, y la angustia aumentaba con cada minuto que pasaba.
Fue en ese momento que un joven intrépido, cuyo apellido Beiza con valentía, se embarcó en su propio kayak y se dirigió decididamente hacia el individuo arrastrado por la corriente mar adentro. La esperanza renació cuando Beiza se convirtió en la última línea de defensa para uno de los kayakers en apuros.
Casi al mismo tiempo, un equipo de la Prefectura llegó al lugar en una impresionante demostración de coordinación y eficiencia. Utilizando una moto de agua, los rescatistas profesionales lograron llegar al segundo afectado, quien se debatía entre las olas. La tensión disminuyó al ver que las autoridades habían llegado, y los espectadores aliviados aplaudieron el esfuerzo conjunto para salvar vidas.
El primer kayakista en problemas había estado luchando contra las aguas traicioneras durante aproximadamente noventa minutos, y finalmente, tras un titánico esfuerzo, logró volver a la superficie, exhausto pero a salvo.
