Condenaron a un loberense que abusó a su hijastra durante 3 años, la amenazaba y le daba dinero tras los actos

En un hecho que conmocionó a la comunidad de Lobería, un individuo de 34 años fue condenado a 12 años y medio de prisión por un espeluznante caso de abuso sexual que afectó a su propia hijastra durante tres largos años. El veredicto fue emitido tras un juicio abreviado llevado a cabo en el Tribunal Criminal Oral N° 1 de Necochea, en el que la víctima, con valentía, se mostró conforme con el resultado del proceso legal.

La historia de horror se desarrolló en la vecina localidad de Lobería, donde una niña, que en aquel entonces tenía entre 9 y 12 años, sufrió el abuso despiadado por parte del ahora convicto. En ese entonces, este individuo mantenía una relación con la madre de la pequeña y compartían un hijo en común, lo que hacía que la víctima estuviera aún más expuesta a sus depravados actos.

Las atrocidades perpetradas por el abusador quedaron al descubierto a través del testimonio de la víctima, proporcionado durante una entrevista en Cámara Gesell. La niña reveló detalles escalofriantes de los horrores a los que era sometida por el agresor, quien se aprovechaba de las ausencias de su madre o de sus momentos de sueño para cometer sus abominables actos.

Como es lamentablemente común en casos de esta naturaleza, el agresor amedrentaba a la niña, amenazándola si revelaba lo que ocurría en su hogar. En un intento retorcido por justificar sus acciones, llegaba incluso a convencer a la pequeña de que lo hacía por su propio bien, como si de alguna manera estuviera preparándola para el futuro.

El grado de perversión alcanzado por el agresor era tan aberrante que en ocasiones llegaba a darle dinero a la víctima después de haberla sometido a sus abusos. Esta manipulación psicológica y los actos viles perpetrados dejaron cicatrices indelebles en la psique de la joven.

La fiscalía, encabezada por Marcos Bendersky, logró reunir las pruebas necesarias para llevar a cabo un juicio abreviado. La víctima, alentada por una amiga, finalmente se animó a contarle a su madre la pesadilla que había estado viviendo. En ese momento, la pareja se separó de inmediato y abandonaron la ciudad en busca de un nuevo comienzo.

En la audiencia que marcó el desenlace de este oscuro capítulo, el tribunal emitió un veredicto, condenando al abusador a 12 años y medio de prisión. El fallo se basó en su culpabilidad por los delitos de abuso sexual con acceso carnal agravado, todo ello agravado por el abuso de la situación de convivencia preexistente con la víctima, quien era menor de edad en el momento de los hechos.