Robos y violencia a la orden del día: Encerraron y golpearon brutalmente a una mujer de 67 años en Quequén para robarle

El pasado jueves 4 de enero, la tranquilidad de una familia de Quequén se vio sacudida por un acto delictivo brutal que dejó a una mujer de 67 años, Alicia Beatriz Morales, en estado de shock. Un joven delincuente, con un historial extenso de antecedentes penales, perpetró un violento robo en su domicilio, dejando a los vecinos consternados y preocupados por la creciente ola de delitos en la zona.

El incidente salió a la luz este lunes, cuando los Agentes de la DDI Necochea lograron la aprehensión del perpetrador, un individuo de 21 años que había recientemente obtenido la libertad tras cumplir una condena. La detención se llevó a cabo en cumplimiento de una orden emitida por la Dra. Aida Lhez, titular del Juzgado de Garantías nro. 2 Departamental, a solicitud de la UFI 20.

Según pudo saber Diario Cuatro Vientos, los hechos ocurrieron a las 6:40 de la mañana del mencionado día en la vivienda de un matrimonio en la calle 582 al 1500 de Quequén. Morales fue víctima de una violenta agresión por parte del delincuente, quien la golpeó brutalmente, propinándole patadas y trompadas antes de encerrarla en un baño. El nivel de violencia alcanzado es alarmante, ya que incluso le pidió que se muriera.

En diálogo con Cuatro Vientos, Alicia describió la terrible experiencia que vivió: “Mi esposo se había ido de acá a las 7 menos 20”, dijo y agregó que instantes después “sentía murmullos yo y pensé que era él con el sobrino que estaba hablando y me levanté para preguntarle si todavía no se había ido pero era la persona esta que estaba metido adentro”.

“Ahí empezó a golpearme, a pedirme plata y le di todo lo que tenía”, sostuvo la mujer y agregó que “después revolvió todo, me tiró en el baño, me golpeó, me pateó y me quiso asfixiar con cosas encima”.

La mujer relató que el agresor la golpeó, exigiendo dinero, y ella entregó todo lo que tenía. 

Alicia afirmó que el ladrón no actuaba solo, sugiriendo que tenía un cómplice que lo esperaba afuera. "Lo reconocimos porque yo le había visto la cara, además un vecino nos dio dos nombres y buscamos en internet y lo reconocí ahí", reveló. Afortunadamente, la policía pudo rastrear al delincuente utilizando el celular robado y procedió a su detención.

Morales terminó con lesiones en el rostro, espalda, piernas, brazos y manos, requiriendo hospitalización. A pesar de la gravedad de los golpes, pudo recuperarse rápidamente y fue dada de alta.

El lunes siguiente, la DDI local informó que sus agentes iniciaron una investigación exhaustiva de inmediato. La revisión de cámaras de seguridad municipales y privadas, junto con la recopilación de testimonios, permitió la identificación del ladrón. Con la información obtenida, se llevó a cabo un allanamiento en la residencia del sospechoso, ubicada en la calle 541 al 4200 de Quequén, con el respaldo del grupo especial GAD.

La sorpresa fue mayúscula cuando los agentes descubrieron no solo la totalidad del dinero robado y las herramientas buscadas, sino también varios objetos denunciados como robados en un escruche ocurrido el 28 de diciembre en la Residencia de las Monjas de la Orden Conociana, en la calle 541 al 3600, también en Quequén. La Comisaría de Necochea 2da tenía jurisdicción en este último caso.

Este operativo no solo permitió la recuperación completa del botín resultado de dos robos, sino también la detención del ladrón, quien enfrenta cargos por robo agravado. El detenido fue trasladado a las dependencias de la DDI, donde permanecerá hasta ser indagado por la fiscalía correspondiente.

La comunidad de Quequén, consternada por este acto de violencia, exige respuestas y acciones contundentes por parte de las autoridades para frenar la creciente ola delictiva en la región. La vulnerabilidad de los ciudadanos se ha convertido en una preocupación creciente, y la necesidad de medidas preventivas y de seguridad es más urgente que nunca.