¿El concejal Kristiansen va por la intendencia?: Movimientos para sacar al Chelo Rivero del PJ
Movimientos turbulentos se producen al interior del Partido Justicialista local, donde algunos armados confluyen y otros van camino a la colisión, todo con mira al calendario electoral de los años por venir.
A pesar del pedido expreso del jefe de gabinete provincial Carlos Bianco, que hace un par de meses atrás participó de una cena de camaradería en Necochea pidiendo la unidad de las diferentes facciones locales del justicialismo, la presión para que finalmente Marcelo "Chelo" Rivero deje la presidencia del PJ se mantiene.
Es que Rivero fue responsable de la peor elección del justicialismo en su historia en nuestro distrito, generando algunas suspicacias dentro de su propio partido acerca de una posible alianza oculta con el oficialismo municipal para postulase como candidato de paja. Esas suspicacias se mantienen presentes al día de hoy y la presidencia del PJ en manos de Rivero es considerada "caduca" por parte de muchos sectores dentro del peronismo.
Uno de ellos parece ser la vertiente del Sindicato de Camioneros, que en Necochea conduce Alberto Peralta y que mantiene buenos vínculos con el concejal Julián Kristiansen, quien recientemente avanzó sobre la agenda de opinión pública poniendo sobre la mesa (otra vez) un proyecto de cobro de tasa portuaria, subiéndose al fallo judicial que dispuso la constitucionalidad de la norma y la posibilidad que el Ejecutivo Municipal ejerza su derecho al cobro.
Sucede que Christiansen parece que está pidiendo pista y está organizando un acto en la sede del PJ para darle espacio al intendente de Avellaneda, Jorge Ferraresi, quien está caminando la provincia con el afán de postularse a la gobernación en 2027. Para el acto, previsto para el 23 de agosto en la sede partidaria de 61 y 68 y el presidente del justicialismo ni siquiera está invitado a decir unas palabras, lo que da el tono de la exclusión prevista y la interna creciente.
Pasa que a Rivero los propios peronistas preferirían tenerlo fuera del partido, no sólo después de la estrepitosa derrota del año pasado, sino también porque no llega a colectar ni siquiera voluntades sueltas entre la militancia. Recientemente organizó un ciclo de charlas y lo magro de la concurrencia dejó a las claras que su tiempo de liderazgo en el peronismo ha terminado. Además, las pretensiones de Rivero de ocupar un puesto clave en Puerto Quequén (se habló de que habría pedido la gerencia general del Consorcio) causó aún más incomodidad de la que ya hay en la tregua pautada entre el CGPQ conducido por Jimena López y el municipio de Necochea, en manos de Arturo Rojas.
Por parte de Ferraresi, además estará inaugurando una nueva sede partidaria, mejor dicho, una versión más del sello que maneja Roberto Gómez, un repetido dirigente peronista cuyo principal capital es la caja del sindicato de trabajadores de AFIP en Necochea y una construcción política que consta de él mismo y poco más.
Todo este contexto aporta a un mapa del peronismo local que se encuentra vacío de liderazgos y sumido en la incerteza local. Aunque varios referentes peronistas consideran que Christiansen aún está "muy crudo" (apenas ha asumido una concejalía en diciembre) su incursión en el acto junto a Ferraresi abre una ventana y representa una posibilidad que busca reconfigurar el tablero peronista buscando un rearmado tras el fracaso de Rivero de los últimos años.
