Interna en el PJ: ¿Los sindicatos quieren remover al "Chelo" Rivero de la presidencia?
Está muy revuelta la interna peronista y algunas versiones indican que incluso los gobernadores intentarán destituir a Alberto Fernández de la presidencia del Partido Justicialista, en consideración de las perspectivas de los justicialistas de cara al futuro, el enfrentamiento con el gobierno nacional y una presunta pretensión del ex presidente de seguir al frente del partido convocando a una reunión apenas regrese de España este viernes.
Aunque Fernández tiene mandato hasta el 2025 al frente del PJ, lo cierto es que en la búsqueda de reordenarse y la creciente conflictividad social, la necesidad de los peronistas es sacarse de encima al "clavo" del ex presidente, que incluso ni siquiera es percibido como un "compañero" dado que él mismo se ha presentado publicamente como "socialdemócrata".
Y con ese malestar como cortina de fondo es que en Necochea el liderazgo de Marcelo "Chelo" Rivero al frente de la conducción local del justicialismo también pende de un hilo, con algunos sindicatos expresando su descontento con un dirigente que fue responsable de la peor derrota del peronismo en los últimos 30 años en nuestro distrito.
Sucede que en las filas pejotistas ha caído muy mal la intención de Rivero de recibir al gobernador Axel Kicillof cuando venga de visita la próxima semana. Fuentes dentro del partido aseguran que el ex candidato tiene cierto interés en reclamarle al gobernador algún nombramiento que quedó pendiente tras los comicios.
Luego de las elecciones en las que Rivero llevó al Partido Justicialista a una de las peores derrotas de su historia (con casi 10 mil cortes de boleta en su contra), la expresión de malestar de los sindicatos se acentuó al conocerse que por lo bajo existía una especie de acuerdo que le permitiría al ex candidato acceder a un puesto gerencial en el Consorcio de Puerto Quequén, algo que hasta el momento no sucedió tras hacerse públicas estas versiones.
En ese contexto y con una crisis galopante, la presunta intención de Rivero de recibir al gobernador para hablar de ese tema pendiente es que ha causado bronca y malestar en medio de las cada vez más complicadas dificultades que enfrentan los trabajadores y la sociedad en general con el ajuste salvaje que impone el gobierno de Javier Milei.
