Megaperativo contra el abuso infantil: 114 allanamientos realizados, Necochea entre las localidades involucradas

En un importante avance en la lucha contra la explotación sexual infantil, la Provincia de Buenos Aires fue escenario de la "Operación Protección de las Infancias IV", que resultó en la realización de 114 allanamientos en 65 localidades diferentes, entre ellas Necochea. Esta acción fue llevada a cabo de manera conjunta por la Policía Federal Argentina y las fuerzas locales, bajo la supervisión del Ministerio Público de la provincia. El operativo, desarrollado el pasado martes, tuvo como resultado la recuperación de 70 menores en situaciones de riesgo y la detención de 20 individuos, mientras que se emitieron acusaciones contra más de 100 personas.

Desde las primeras horas de la mañana, más de 1.140 efectivos se desplegaron a lo largo de la provincia para desarticular redes involucradas en la producción y distribución de material de abuso infantil. El operativo se enmarcó en el trabajo del Departamento de Delitos Conexos a la Trata de Personas, Pornografía Infantil y Grooming, cuya tarea es fundamental para abordar este grave problema que afecta a la infancia en Argentina.

De la investigación se desprendió que 16 de los sospechosos mantenían un contacto directo con niños y adolescentes, mientras que otros 67 convivían con menores de edad. En total, se requisaron 529 dispositivos de almacenamiento, incluidos 261 teléfonos móviles, junto con drogas como marihuana y cocaína, así como otros artículos no digitales que pudieron haber sido utilizados en la comisión de estos delitos.

Además de nuestra ciudad, las localizaciones de los allanamientos incluyeron departamentos judiciales de múltiples localidades como Avellaneda-Lanús, Bahía Blanca, La Matanza, La Plata, San Isidro y otros, además de intervenciones en la provincia de Tucumán. Esta amplia cobertura revela la magnitud de la operación y la colaboración entre distintas fuerzas sociales y judiciales para erradicar la explotación de menores.

Uno de los episodios más impactantes de los allanamientos ocurrió en la cárcel de Florencio Varela. Allí, las fuerzas policiales descubrieron que dos celdas habían sido convertidas en “búnkeres” para almacenar y distribuir imágenes de abuso infantil. En el lugar, encontraron varios móviles y una computadora que utilizaban los internos para gestionar la venta y difusión de material ilegal. Los investigadores explicaron que los reclusos habían instalado una aplicación diseñada aparentar ser una calculadora, pero que en realidad permitía acceder a carpetas ocultas donde se almacenaban los contenidos ilegales.

A través de estas aplicaciones, los internos contactaban a menores y les solicitaban que enviaran material de abuso. Posteriormente, extorsionaban a las víctimas amenazando con hacer público ese contenido. Los miembros de la red también compartían estas imágenes con otros prisioneros y cómplices en el exterior mediante la misma aplicación. Se notificó la imputación de seis internos y se incautaron siete teléfonos durante este allanamiento. Uno de los líderes de la red, quien cumplía una condena de 50 años por abuso sexual, mantenía un archivo meticulosamente organizado con los nombres de sus víctimas, lo que evidenciaba la premeditación de sus actos.

Además, los fiscales que se especializan en delitos sexuales informaron sobre el descubrimiento de otra red de trata que operaba a través de la aplicación de mensajería WhatsApp bajo el inquietante nombre de “Porno Hermanos”. Las conversaciones recuperadas mencionaban la posibilidad de obtener un niño de solo seis años, a quien uno de los involucrados ofrecía por una suma de dinero significativa. Un mensaje de 2020 aludía a un arreglo donde se ofrecía al menor durante dos días a cambio de “20 mil” sin especificar la moneda, lo cual generó preocupación entre los investigadores que examinan la recurrencia de este tipo de ofertas en contextos de explotación.