Denuncian que en Costa Bonita también fumigan al lado de una escuela

martes, 5 de diciembre de 2023 · 11:00

Las quejas de vecinos de barrios periféricos o, como en este caso, de localidades enteras por malas prácticas agrícolas en la fumigación de campos volvieron  a hacerse oír esta semana.

Plegándose a los reclamos frecuentes de Villa del Deportista, Villa Zabala y el barrio Tigre Dientes de Sable (125 y 60), en Costa Bonita los vecinos también reclaman por las fumigaciones que, en una aplicación desacertada, terminan pulverizando venenos sobre casas y escuelas.

Un caso paradigmático tuvo lugar hace algunos años, cuando dos alumnos de la escuela Almafuerte, en los límites entre Villa del Deportista y Villa Zabala, sufrieron una intoxicación al comer una fruta que había sido contaminada con los venenos flotando en  el aire tras una fumigación.

En Costa Bonita los vecinos reclaman por una situación similar a la de Zabala que se produce con cierta regularidad en la localidad. Según los vecinos, los cultivos que se encuentran en el ingreso al pueblo, sobre el camino del Golf, fumigan  sin observar las condiciones del clima, haciendo que los agroquímicos se depositen sobre las casas e incluso la Escuela Primaria Nº 41 Niñas De Ayohuma.

En un mensaje enviado el jueves pasado a la redacción de Cuatro Vientos junto a un video, los vecinos mostraron la situación, que replica los mismos parámetros que en otras áreas periféricas de la ciudad:

"Nos comunicamos vecinos de costa bonita xq en este momento están fumigando unas manzanas lindantes al pueblo, al lado de la calle11 y el camino del golf o a Antártida argentina. Viniendo todo el viento al pueblo. Son las primeras cuadras hacia adentro del pueblo, escasas cuadras de la escuela, y de muchas casas..."

Área Complementaria

Si bien el uso de agroquímicos no está prohibido y la calificación que brindan las empresas que los comercializan aseguran que se trata de productos seguros (algo que está fuertemente cuestionado por numerosos estudios en todo el planeta, llegando incluso a la prohibición de los mismos en distintos casos), lo cierto es que el problema en nuestra ciudad tiene que ver más con la normativa territorial que con el uso de los productos en sí.

Sucede que por ordenanza, existe en el ejido urbano necochense un área intermedia entre la zona rural y la zona urbana llamada "Área Complementaria", cuyos usos están especificados claramente teniendo en cuenta la interacción entre la población de la ciudad y la actividad agrícola.

Según la normativa, en el área complementaria se puede practicar agricultura intensiva (huertas), más no agricultura extensiva (mayormente cereales en grandes superficies), que es la que aplica los agroquímicos de una manera más volátil y masiva, produciendo grandes nubes de veneno que son arrastradas por el viento hacia las poblaciones aledañas. Como las autoridades han otorgado muchas vías de excepción para que se usen los campos destinados a huertas como cultivos extensivos, las fumigaciones están a la orden del día y las buenas prácticas quedan pendientes.

Es que a pesar de estar autorizados, los aplicadores suelen desestimar las condiciones climáticas favorables para hacer su trabajo, que tiene que ver con considerar la dirección del viento cuando realizan una fumigación: si el viento corre en dirección a casas y escuelas, se recomienda no realizar la aplicación. Sin embargo, en muchas oportunidades esto no se cumple ni existen multas o alguna clase de sanción sobre las aplicaciones indebidas.

En ese contexto, con los estudios que revelan lo nocivo para las salud que son estos venenos completamente solapados (por ejemplo, SENASA sigue sin advertir adecuadamente sobre la toxicidad de productos que incluso están prohibidos en otras partes del mundo) y con excepciones permanentes concedidas aún a pesar del crecimiento de la ciudad en el área complementaria, las quejas de los vecinos son la única advertencia permanente y las acciones preventivas al respecto quedan libradas a una buena voluntad de los aplicadores y dueños de los cultivos que no siempre siguen los parámetros sanitarios correctos.

Otras Noticias