NEGOCIO PARA 2 O 3 VIVOS
Casino: La gestión Rojas pretende entregar el Complejo para pagar una deuda por algo que no se hizo
El Departamento Ejecutivo avanza en la única idea que ha tenido con respecto al Complejo Casino en los tres años que lleva de gestión: dejarlo abandonado, bajarle el precio y terminar cediéndolo por debajo de su valor en el marco de una emergencia ficcionada por su aparato de propaganda.
Es que en el transcurso de la semana la Comuna mandó a uno de sus "espadachines" favoritos, el presidente del HCD, Guillermo Sánchez, conocido por su intento fallido de entregar terrenos del parque para que sus amigos instalaran unas canchas de tenis, a presentar sin descaro las intenciones de la gestión de entregar el complejo Casino a la empresa concesionaria de la recolección de basura, íntimamente vinculada al intendente y funcionarios municipales.
Hablando del Casino en declaraciones al periodista Jorge Gómez, Sánchez señaló que "ya nos hicimos cargo y nos seguiremos haciendo cargo, dijimos que lo vamos a vender y con esa plata vamos a hacer obra pública, aunque hasta ahora no hay relación entre la venta del Casino y el pago a la empresa de recolección”. En rigor de verdad, el intento de venta del Casino se cayó porque la Comuna no tenía todos los papeles en orden. De hecho, al día de hoy sigue sin cumplir con los trámites ni con las reparaciones prometidas para que la mesa de juego vuelva a funcionar este verano.
“No hay que tenerle miedo a nada ni escondernos, y vamos a hacer lo que hay que hacer para que la ciudad esté mejor, y si hay que relacionar una cosa con la otra, lo vamos a hacer”, señaló. La idea, básicamente, es entregar el complejo como pago por una deuda que tiene muchos años en la ciudad por un servicio de disposición final de basura que la empresa nunca brindó.
En otras palabras, la Comuna evalúa entregar el Casino para pagar una deuda por algo que no se hizo.
"Los gobiernos que han pasado de una manera u otra han agachado la cabeza, han mirado para otro lado y nadie se hizo cargo. Nosotros nos vamos a hacer cargo y vamos a empezar a solucionarlo, pero no se va a solucionar de un día para el otro, porque hace 20 o 30 años que estamos con lo mismo, y sé que es un tema que preocupa al Intendente, que nos estamos haciendo cargo y que vamos a solucionar”.
Desafortunadamente, la gestión que "se hace cargo" lleva tres años sin un solo avance en la materia y no deja de armar esquemas que están más enfocados en hacer un negocio y alimentar la imagen del intendente en busca de la reelección que resolver cualquiera de las cuestiones claves del municipio.
"Tenemos una cuenta pendiente que es pagar la deuda que hace años que está y nadie paga. Hay que asumir la responsabilidad y pagarla. Firmar un contrato que la Municipalidad pueda pagar y que el prestatario del servicio siga cumpliendo; y sobre todas las cosas el tema ambiental con el tratamiento y disposición final, de lo que nadie se ha hecho cargo”, señaló el concejal oficialista.
El negocio detrás
Antes de ser electo, el actual intendente Arturo Rojas había prometido que el Casino no se iba a vender en el estado en el que se encontraba, señalando su evidente deterioro, para no beneficiar a "2 o 3 vivos" con la venta. En aquellos momentos, la campaña electoral del 2019, la municipalidad había insinuado la posibilidad de poner al Casino como garantía de pago de la deuda que existe por la disposición final de residuos que nunca se hizo. El en ese entonces candidato Rojas fue uno de los que puso el grito en el cielo contra la iniciativa.
Sin embargo, luego de asumir como intendente, Rojas borró con el codo lo que escribió con la mano y cuando no se había cumplido un año de esas declaraciones, desplegó un operativo relámpago para forzar la venta de todo el complejo luego de un incendio intencional que destruyó el interior del Teatro Auditorium. Nunca se encontró al responsable del incendio y el dinero del seguro no fue usado para restaurar lo perdido y se perdió sin mayores explicaciones del Ejecutivo.
En ese contexto, Rojas y su equipo de abogados intentaron imponer la venta en medio de la pandemia, solapadamente, sin conseguirlo dado que no tenía la escritura del terreno más importante de los que componen el complejo (el playón de estacionamiento). Las licitaciones se cayeron y el "hacerse cargo" señalado por Sánchez quedó en la nada misma.
Con las nuevas declaraciones, Sánchez y la gestión intentan volver a poner el tema sobre la mesa, precisamente para que 2 o 3 vivos hagan el negocio: después de todo, el propio secretario de Legal y Técnica del municipio, Ernesto Povilaitis, es parte del entramado legal de la empresa de recolección de residuos y sería uno de los principales interesados en que se concrete la operación.
La vinculación entre funcionarios municipales y la empresa de recolección de basura es bien conocida en la ciudad, sólo que se mantiene solapada por un aparato de propaganda que, por otro lado, también es manejado por el funcionario, que lleva largos años operando en las sombras en los pasillos de la Comuna, habiendo sido parte, por ejemplo, de la defensa del destituído Horacio Tellechea y encargado del área legal del municipio durante el interinato de José Luis Vidal.
Recientemente la vinculación entre el titular de la empresa de recolección RELISA, Guillermo Martínez, y la Comuna quedó al descubierto cuando durante una protesta del Sindicato de Fleteros en la playa de camiones de ACA, el titular del sindicato, Mario Pereyra, señaló directamente a Martínez como si fuera el "valijero" del intendente Arturo Rojas, manejando dineros en negro a través del cobro sin ticket del estacionamiento de los camiones y el uso de una financiera en el centro de la ciudad.
Con todo el entramado a la vista de la población, la Comuna sigue haciendo como si nada y pretende presentar sus movimientos como acciones de gestión y un "hacerse cargo" que tiene mucho más que ver con sus intenciones de hacer negocios que con brindar soluciones sostenibles y con beneficios reales para la población.