¿Qué ha significado el lanzamiento del iPhone 14 para Apple?

Como ocurre todos los años a mediados de septiembre, el pasado día 8 Apple presentó a través de una nota de prensa el lanzamiento de su nueva generación de teléfonos inteligentes, identificados con el número 14. Con este anuncio se mantiene la tradición por la que se renueva la serie estándar de teléfonos de la compañía de Cupertino de forma anual en Septiembre (versiones “intermedias” como la 4s, 5c, SE, SE2 o SE3 han tenido un calendario de lanzamientos dispar). Veamos a continuación cuáles son los aspectos más llamativos de esta generación y qué puede suponer este lanzamiento para Apple.

Manteniendo una fórmula conocida

El modelo correspondiente a este año 2022 ha mantenido una línea muy continuista respecto al modelo anterior, tanto en diseño como en prestaciones.

En lo referente a la apariencia exterior, las nuevas versiones son prácticamente iguales a las del año pasado. Nuevos colores y cambios mínimos en la disposición exterior de las cámaras en algunos modelos son lo único que llama la atención.

En términos técnicos destaca el mantenimiento del procesador A15 Bionic en la versión normal y Plus, el mismo que el usado en el iPhone 13 Pro, optando por el A16 Bionic para las versiones Pro. Aunque es sabido que no todo es el procesador y que probablemente pocos usuarios expriman sus capacidades al límite, en este mundo la potencia y la novedad venden. El A15
proporciona potencia suficiente para cualquier aplicación (desde juegos a trading, pasando por cualquier red social, y el consumo de contenidos digitales), pero el uso generalizado del A16 podría haber proporcionado una sensación de mayor longevidad a esta generación.

De igual manera, en las versiones de entrada, las cámaras traseras prácticamente repiten configuración respecto a la generación anterior con doble cámara de 12 megapíxeles cada una, dejando a las versiones Pro los sensores más capaces. No obstante, novedades en el software de procesamiento de imágenes (Photonic Engine) prometen mejoras en el apartado fotográfico, especialmente en condiciones de poca luz.

Por último, la pantalla de las versiones normales una vez más es similar a la de la generación anterior y se distancian las versiones Pro con pantallas de mayor brillo y tasa de refresco, además de con funcionalidades específicas como la Dynamic Island.

En resumen, las mejoras técnicas más reseñables han acabado en las versiones Pro, dejando en tierra de nadie los modelos más “básicos” (siempre teniendo en cuenta que estamos hablando de una gama alta, tanto por precio como por prestaciones).

Mejoras, precio y el impacto en el posicionamiento

Anteriormente hemos visto como, técnicamente, las versiones más atractivas de esta generación son las Pro, relegando las versiones normales y Plus a un segundo plano. En términos económicos además, todas las versiones han incrementado su precio (las versiones Pro no habían subido de precio en 5 años). A pesar del encarecimiento de estas últimas, el encarecimiento de las versiones normales y el acercamiento entre gamas, deja en una posición complicada a estas versiones “básicas”, pudiendo desincentivar su compra y siendo canibalizadas por otras versiones en esta generación. Por el momento no queda claro si las
mejoras técnicas en las versiones Pro se han dado para justificar el incremento en precio de esta gama, o ha sido simplemente un tema de posicionamiento.

Si este escenario de competencia entre terminales de la misma generación no fuera lo suficientemente retador para un iPhone 14  eclipsado por sus hermanos, la comparativa contra la generación anterior también arroja un difícil resultado.

La extrema cercanía técnica entre generaciones hace que el iPhone 14, al menos la versión básica, no tenga un posicionamiento tan claramente superior a versiones Pro del año pasado. Si a esto sumamos la inflación acumulada en el año 2022 y el  encarecimiento generalizado de los productos en todos los sectores, afectando también al precio de los terminales de esta
generación, tenemos como resultado una duda razonable entre iPhone 14 y iPhone 13.

Los usuarios que se vean forzados a actualizar su teléfono este año se plantearán si realmente merece la pena optar por un iPhone 14 sensiblemente más caro que una versión Pro del iPhone 13, cuando en esencia son prácticamente similares. Igualmente, para aquellos que no tengan tanta urgencia en cambiar de terminal, ¿qué atractivo tiene una generación sin apenas cambios y con un precio circunstancialmente muy elevado?, ¿merece la pena esperar a novedades relevantes en la siguiente generación y a una estabilización de los precios? 

Será necesario esperar a conocer informes de ventas de los distintos terminales durante el 2023 para saber el comportamiento de esta generación respecto a unas decisiones de Apple acogidas con recelo por los analistas.