"Coordinadores operativos": La original forma de la gestión Rojas de nombrar funcionarios sin dar explicaciones
Durante la campaña del 2019 el actual intendente de Necochea Arturo Rojas y todo su equipo profirió acusaciones contra su antecesor Facundo López sobre la cantidad de funcionarios que tenía en su planta política, todo en el marco de una campaña para acusar al bioquímico de una pésima gestión que se veía mal y en crisis financiera sobre todo en su último año de gobierno.
Aunque en el organigrama oficial constaban sólo 49 cargos ocupados (que de cualquier manera mostraban una expansión de la plantilla histórica) en las acusaciones Rojas llegó a mencionar que eran más de 100 y a cada declaración ofrecida sobre el tema el número iba creciendo. Desafortunadamente, nadie en la campaña del actual intendente pudo mostrar nunca la lista completa ni ofrecer nombres propios, por lo que las acusaciones no fueron más que señalamientos vacíos en el marco de una campaña sucia que se llevó adelante contra el bioquímico.
Al no poder ofrecer explicaciones sobre las acusaciones, aún después de haber accedido a la intendencia y disponer de los documentos oficiales que hubieran probado sus dichos, el discurso de Rojas apuntó a que los mentados funcionarios eran en realidad "destajos VIP", es decir, contrataciones de personal con destajos con salarios por encima de la media que funcionaban paralelamente a la plantilla de funcionarios. Lamentablemente el intendente tampoco mostró ningún listado de las contrataciones para afirmar sus acusaciones.
En ese contexto, lo que sí ha podido demostrarse es que fue Rojas quien amplió monstruosamente su planta de personal político y que las contrataciones de funcionarios por fuera de la plantilla es práctica habitual de su gestión bajo el nombre de "coordinador operativo", una suerte de destajo VIP que se entrega a personal de confianza para realizar tareas que no terminan de ser reconocidas abiertamente como parte de las prácticas del Estado Municipal.
Lobbystas, militantes de confianza, facilitadores de negocios y hasta trolls en las redes sociales forman parte de esa maraña de "funcionarios" en las sombras que asisten "por afuera" de la oficialidad pero dentro de la plantilla de pagos a la política de Rojas, por un lado viabilizando algunos proyectos y, por el otro, militando en redes, atacando a rivales y, en definitiva, presentándose a disposición de las necesidades ocultas del intendente.
Los ejemplos abundan y se han reproducido durante los tres años que lleva el intendente Rojas al frente de la Comuna. Se calcula que a los 75 cargos reconocidos por esta gestión se agrega la misma suma en coordinaciones y otros cargos que forman una suerte de red que recubre las áreas donde ya hay personal asignado que pertenece a la planta permanente del municipio pero no es de la plena confianza del Ejecutivo.
Nombrados como coordinadores operativos estuvieron algunos nombres cercanos al intendente, como Rodrigo Tabarez, que luego fue promovido dentro de la subsecretaría privada y pasó a ser director de un área nebulosa en la subsecretaría de Comunicación, una de las áreas que más contrataciones creó y es reconocida por la producción de "contenidos políticos" que se difunden por fuera de la prensa oficial.
Otro nombre que figura en los expedientes como "coordinador operativo" fue el de Rosana García, que salió de la secretaría de Turismo de fugaz funcionamiento en la Comuna tras la desarticulación del ENTUR y durante todo este año estuvo haciendo una suplencia como personal jerárquico categoría 1 con 40 horas semanales reemplazando a Andrea Pereyra, que entró en licencia sin goce de sueldo todo este año.
También hubo cargos de "coordinador operativo" para algunos nombres vinculados a los acuerdos políticos del intendente, como es el caso de Facundo Croci, que en octubre del año pasado ocupaba uno de esos puestos y luego fue promovido a Director General de Transportes, puesto al que accedió como parte de la alianza que Rojas mantiene con Martín Domínguez Yelpo y la UTA.
Entre las coordinaciones especiales que se registra también hay especialistas en redes sociales, un eufemismo para denominar a la militancia rentada en la web, que a través de la generación de "contenidos" (comentarios y reportes en las redes sociales) se encargan de apuntalar el discurso del intendente. El último nombramiento de este tipo fue en agosto de este año para Diego Ponce, cercano al intendente y parte de "La Banda del Avispón", un grupo de seguidores del corredor Jhonnito De Benedictis del que forma parte el Jefe Comunal.
Con esas contrataciones de funcionarios y destajos VIP el intendente Rojas terminó llevando adelante aquello de lo que acusó a su antecesor, poniendo de manifiesto que la transparencia de su gestión ha sido solamente un slogan de campaña que no se sostuvo en los hechos ni siquiera al comienzo de su mandato: las "coordinaciones operativas" comenzaron a disponerse desde enero del 2020, cuando su gobierno no llevaba ni un mes de asumido.
Los nombramientos siguen la lógica de generar un círculo de confianza propio para proteger al intendente con financiación del erario público. Mientras los trabajadores municipales se mantienen en un plan de lucha porque la Comuna mantiene sus salarios hasta un 30% por debajo de la inflación de este año, los nombramientos y la expansión de la planta política del Ejecutivo ha sido una constante que quedó cubierta por el aparato de propaganda siempre en campaña y lejos de las necesidades reales de los vecinos.