Inglaterra: Un joven asesinó a su madre marplatense y a sus dos hermanos
Un trágico triple crimen conmocionó a la localidad de Luton, Inglaterra, cuando una mujer de origen marplatense y dos de sus hijos fueron brutalmente asesinados en su propia casa. La mujer, identificada como Juliana Falcón, y sus hijos Giselle, de 13 años, y Kyle, de 16, fallecieron tras ser baleados por el hijo mayor de la familia, Nicholas Prosper, de 18 años, quien fue detenido poco después del ataque.
El hecho, que tuvo lugar el pasado viernes, se dio a conocer en las últimas horas en Argentina debido a que Juliana, de 48 años, vivía desde hacía varios años en Europa, donde adoptó el apellido de casada, Prosper. Originaria de Mar del Plata, Juliana había construido su vida en Inglaterra, donde fue sorprendida por este violento episodio que terminó con la vida de ella y dos de sus hijos menores.
Los hechos y la detención de Nicholas Prosper
La madrugada del crimen, la policía local fue alertada alrededor de las 5:30 AM tras reportes de disparos en un departamento de Luton, ubicado a unos 60 kilómetros de Londres. Al llegar al lugar, los agentes encontraron a Juliana y a sus dos hijos gravemente heridos. A pesar de los esfuerzos médicos, los tres fallecieron poco después.
El hijo mayor, Nicholas Prosper, fue arrestado a unos 600 metros de la escena del crimen. En el momento de su detención, las autoridades le confiscaron el arma con la que presuntamente llevó a cabo el ataque. Según las primeras investigaciones, Nicholas fue el único responsable de las muertes, aunque los motivos detrás de su accionar aún no han sido esclarecidos del todo.
El único hijo sobreviviente de Juliana, un joven de 21 años que no se encontraba en el departamento al momento del ataque, vive en otra residencia más cercana a su universidad, por lo que no fue afectado directamente por el suceso. Este dato sumó una dosis de dolor para la familia, ya que el joven se salvó por estar en otro lugar, mientras que su madre y dos hermanos perdieron la vida en su hogar.
El proceso judicial y el drama familiar
La primera audiencia del juicio por el triple crimen se celebró el lunes pasado. En la misma, Nicholas Prosper confirmó su identidad y fecha de nacimiento ante la mirada angustiada de los familiares y amigos de las víctimas, quienes asistieron consternados por el suceso. En un momento cargado de emociones, el padre del joven, Ray Prosper, se dirigió a su hijo mientras lo retiraban de la sala y, entre lágrimas, le dijo: “Todavía te amo, hijo. Sé que no es tu culpa”.
A pesar de esta dramática declaración, las autoridades británicas continúan investigando las causas que habrían llevado a Nicholas a cometer el terrible ataque. Se están realizando peritajes psiquiátricos para determinar si el joven presentaba algún trastorno mental en el momento de los asesinatos. Aunque aún no se han hecho públicos los resultados de estos análisis, el caso ha generado un profundo debate sobre la salud mental y la violencia intrafamiliar.
La vida de Juliana Falcón y el impacto en la comunidad
Juliana Falcón había nacido en Mar del Plata el 4 de junio de 1976. Tras completar su educación primaria en la escuela N°18 y sus estudios secundarios en el Instituto Polivalente de Arte, decidió, poco después de cumplir los 20 años, mudarse a Inglaterra, donde encontró nuevas oportunidades y construyó una vida junto a su familia. Su facilidad para aprender idiomas le permitió integrarse rápidamente en la sociedad británica, donde muchos la conocían simplemente como “Julie”. En su comunidad local, era una persona muy querida y apreciada por su carácter solidario y su participación en diversas causas benéficas.
Amigos y conocidos de Juliana en Mar del Plata, que la recordaban con cariño, se mostraron profundamente impactados por la noticia. “Tenía una calidad humana increíble, era una mujer superinteligente y una madre muy dedicada a sus hijos. No encuentro consuelo ni explicación a lo sucedido”, expresó Marina, una de sus amigas más cercanas en Argentina.
Los hijos asesinados, Kyle y Giselle
Los medios locales y británicos también recordaron a los hijos de Juliana, quienes eran muy queridos tanto por su familia como por sus compañeros y amigos. Kyle, de 16 años, era descrito como “un joven amable y divertido, con una gran pasión por el fútbol y el boxeo”. Giselle, de 13, era conocida por ser “una jovencita cariñosa que amaba a su familia y a sus hermanos mayores”, además de ser una estudiante destacada y apreciada por sus compañeros de noveno año.
Este triple asesinato ha dejado una marca profunda tanto en la comunidad argentina como en la británica, mientras las autoridades continúan investigando los detalles de este trágico caso que enluta a dos naciones.