Argentina terminó el 2023 con una inflación por encima del 200% y quedó cerca de ser la más alta del mundo

El Instituto Nacional de Estadística y Censos de Argentina (INDEC) impactó al país este jueves al publicar cifras que revelan que los precios al consumidor se dispararon un 25,5% en diciembre en comparación con noviembre y un asombroso 211,4% en el transcurso del último año. Este dato, proporcionado por la entidad oficial, marca el nivel más elevado en tres décadas, recordando los traumáticos episodios de hiperinflación de finales de los años ochenta y principios de los noventa, durante los gobiernos de Raúl Alfonsín y Carlos Menem.

La triste realidad es que Argentina ahora ostenta el título de segundo país con la inflación más alta del mundo, superando incluso a Venezuela y quedando apenas medio punto porcentual detrás del Líbano, que encabeza la lista por el momento.

Los indicadores económicos muestran una situación alarmante, que ha dejado atrás la euforia de la victoria en la Copa Mundial de la FIFA para enfrentar un desafío monumental: la escalada vertiginosa de la inflación. La comparación con Venezuela, que experimentó una inflación del 193% en 2023, marcó una disminución significativa desde el 305% registrado en el año anterior. Aunque el Banco Central de Venezuela aún no ha hecho pública la cifra oficial de 2023, la situación parece indicar cierta mejoría en comparación con los años anteriores, cuando el país caribeño enfrentó una hiperinflación durante más de cuatro años.

En el caso del Líbano, la situación es diferente, ya que aún no se conocen las cifras de diciembre. Sin embargo, hasta noviembre, la inflación interanual alcanzaba el 211,9%, según la Administración Central de Estadísticas de ese país. Estos tres países, Argentina, Venezuela y Líbano, son los únicos que superan el 100% de inflación acumulada en un año, según el seguimiento de páginas especializadas como Trading Economics, aunque algunos, como Siria, han dejado de compartir datos de manera regular.

El dramático 25,5% de aumento mensual en Argentina no solo se posiciona entre los peores registros a nivel mundial, sino que la comparación con el resto de los países resulta desoladora. Según el mismo índice de Trading Economics, solo 17 países tienen más inflación en todo un año que lo que Argentina acumuló en un solo mes, específicamente en diciembre.

El desglose de los datos revela que el mayor incremento de precios en 2023 se concentró en bienes y servicios, con un impactante 32,7%. Sectores como salud, transporte y alimentos y bebidas no alcohólicas también fueron fuertemente afectados, exacerbando la crisis económica que atraviesa el país en medio de un cambio de gestión.

La medición del último mes del año pasado refleja las políticas implementadas tanto durante el gobierno de Alberto Fernández como en los primeros días de la administración de Javier Milei, quien asumió la presidencia el 10 de diciembre. La gestión de Fernández dejó al país inmerso en una espiral inflacionaria ascendente. En noviembre, Argentina registró un aumento del índice de precios del 12,8% y una inflación interanual del 160,9%, según el INDEC.

Sin embargo, esta tendencia se profundizó con la llegada del nuevo presidente, marcada por una devaluación de la moneda y la liberación de algunos precios. Ahora, el mandatario se enfrenta a uno de los mayores desafíos autoimpuestos durante la campaña: evitar la hiperinflación y comenzar el difícil descenso de un índice que ha castigado los bolsillos de los argentinos durante décadas.