El Gobierno eleva el piso del impuesto a las ganancias a $1.770.000

En un anuncio realizado en la Plaza de Mayo, el ministro de Economía y candidato a presidente del oficialismo, Sergio Massa, reveló una decisión que afectará significativamente las finanzas de trabajadores y jubilados en el país. A partir del 1° de octubre, el Gobierno eximirá del impuesto a las Ganancias a quienes ganen hasta $1.770.000 en bruto al mes, un aumento que se traduce en un alivio fiscal esperado por muchos.

Esta medida, que se llevará a cabo con ajustes semestrales, representa un paso significativo hacia la reducción de la carga tributaria en Argentina y busca mejorar el ingreso neto de bolsillo de los argentinos.

La noticia fue recibida por trabajadores que se congregaron en Plaza de Mayo para escuchar el anuncio de Massa, quien no solo compartió la buena nueva sino que también anunció su intención de enviar un proyecto de ley al Congreso para eliminar la cuarta categoría del Impuesto a las Ganancias para todos los trabajadores y jubilados del país. Este cambio apunta a beneficiar aún más a los argentinos y reducir la presión fiscal sobre sus salarios y jubilaciones.

Inicialmente, se había especulado que el límite para estar exento del impuesto sería de $1.000.000 mensuales, pero este se elevó a $1.770.000, equivalente a 15 salarios mínimos vitales y móviles (SMVM) que, según el registro de septiembre, asciende a 118 mil pesos. Con este nuevo piso, el impuesto a las Ganancias solo afectará a aproximadamente el 0,88% de los trabajadores registrados, es decir, alrededor de 90 mil empleados jerárquicos. Por otro lado, quedarán exentos de este tributo policías, médicos, maestros, jubilados y otras categorías. Es importante destacar que los funcionarios públicos y las jubilaciones de privilegio también quedarán excluidos.

Hasta la fecha de este anuncio, el piso mínimo para estar exento del impuesto era de $700.870, lo que significa que, de acuerdo con los números del Palacio de Hacienda, alrededor de 701.928 trabajadores y jubilados estaban pagando el impuesto, lo que representa el 7% del total de trabajadores en relación de dependencia.

Un ejemplo concreto ilustra el impacto de esta medida en los ingresos de los trabajadores: un empleado en relación de dependencia con un salario bruto mensual de $800.000 percibía un ingreso neto mensual de $550.308 antes de esta modificación, ya que debía afrontar la retención de cargas sociales por $132.001 y el pago del impuesto a las Ganancias por $117.690. Con el nuevo mínimo no imponible, ese mismo salario bruto se traducirá en un ingreso neto de $667.999, lo que implica una mejora de $117.690 en el salario de bolsillo, equivalente a un incremento del 21,4% 

Además de las medidas inmediatas, el Gobierno planea presentar un proyecto de ley para que, a partir de 2024, el impuesto a las Ganancias solo afecte a los Directores de las sociedades anónimas, los CEO, Gerentes y Subgerentes, así como a las jubilaciones y pensiones de privilegio. Esto marca una clara intención de enfocar el impuesto en los sectores más acomodados de la sociedad y proteger a los trabajadores y jubilados.

El anuncio de Massa se produjo después de un encuentro en el Palacio de Hacienda con los líderes principales de la Confederación General del Trabajo (CGT), la CTA y autoridades de la Cámara de Diputados. 

Massa enfatizó que para él, el salario no representa una ganancia y, por lo tanto, instó a la oposición a reconocer la necesidad de liberar a los trabajadores y trabajadoras de este impuesto. Señaló que las próximas decisiones políticas serán cruciales para el futuro de Argentina y abogó por un país que priorice el trabajo, la educación universitaria pública y la industria. En última instancia, hizo un llamado a la unidad y al esfuerzo conjunto para construir un futuro mejor para todos los argentinos.