Empresarios presentaron a los candidatos un plan para hacer "shock productivo exportador" en la agroindustria
Un grupo de empresarios argentinos, representando a la agroindustria del país, presentó una propuesta destinada a impulsar un crecimiento significativo en el sector agroindustrial, con el objetivo ambicioso de alcanzar los US$91.000 millones en exportaciones para el año 2030. Esta propuesta innovadora, concebida por la Fundación Multiplicar, tiene como propósito no solo revigorizar la economía, sino también darle un impulso crucial al desarrollo sostenible de Argentina.
La Fundación Multiplicar, con sede en Córdoba y liderada por el director de Aceitera General Deheza (AGD), Roberto Urquía, presentó esta iniciativa de transformación a los candidatos presidenciales, entre ellos Javier Milei, Sergio Massa, Patricia Bullrich y Juan Schiaretti. Con un horizonte temporal que abarca desde 2024 hasta 2033, el plan traza un camino claro hacia un "shock productivo exportador" en la agroindustria, abogando por la sustitución de importaciones y un mayor protagonismo de las empresas argentinas en los mercados internacionales.
Este plan integral comprende una serie de medidas estratégicas, que incluyen la reducción de las retenciones a las exportaciones de productos clave. En particular, se propone reducir las retenciones de la soja y sus subproductos del 33% al 20%, del 7% al 4% para el girasol, del 9% al 5% para las carnes, y un aumento del 12% al 17% para el maíz, con la última alza destinada a fomentar la producción de carnes y biocombustibles en Argentina, generando valor agregado en el país.
El programa también promueve el crecimiento de la superficie sembrada y la expansión de la producción, buscando elevar la producción de granos a un nivel sin precedentes. El impacto de estas medidas, según la Fundación Multiplicar, podría elevar las exportaciones de granos de 142 millones de toneladas a 200 millones de toneladas para el año 2030, generando ingresos adicionales anuales por valor de US$20,000 millones.
Una de las facetas cruciales del plan se enfoca en el apoyo a la actividad forestal, promoviendo el desarrollo sostenible y la conservación de nuestros recursos naturales. Además, propone la implementación de una ley de semillas, un seguro agrícola multirriesgo y la revisión de leyes como la de biocombustibles y de arrendamientos para adaptarlas a las necesidades actuales.
El impacto de estas iniciativas no se limita solo a la industria agrícola, sino que se extiende a otras áreas de la economía. Según la Fundación Multiplicar, el país podría experimentar un aumento competitivo significativo en sus economías regionales, llevando las exportaciones anuales a un valor de US$12,500 millones en tan solo seis años. Además, se prevé un fuerte impulso en la inversión en la industria forestal, alcanzando los US$2,800 millones anuales para 2030.
El sector de biocombustibles también podría aumentar su contribución a la economía, generando ingresos en divisas por un valor de US$900 millones para el año 2030. La entrada de divisas por proteínas animales, que abarcaría la ganadería bovina, porcina, aviar y la pesca, se estima en un impresionante total de US$6,200 millones anuales.
El plan no se detiene aquí. También destaca la creciente importancia de las "agtech", empresas que impulsan el progreso tecnológico en la agricultura y la ganadería, que podrían aportar otros US$2,000 millones en divisas, enriqueciendo aún más la diversidad de la economía argentina.