El presente y el futuro de los casinos en Argentina

La industria del juego está en plena expansión en todo el mundo y Argentina es uno de los puntos de referencia para América Latina. Los modos de realizar apuestas, así como las modalidades para ofrecerlas, están cambiando radicalmente, impulsadas por el frenético avance tecnológico. Estos nuevos formatos requieren regulaciones modernas que revisen su alcance y brinden seguridad a los usuarios.

La tendencia mundial parece indicar que los casinos de tierra van perdiendo lugar en tanto avanza el juego online. De hecho, las casas de apuestas y los casinos virtuales han mantenido un ritmo de crecimiento sólido durante los últimos veinte años que no parece tener freno. Por el contrario, las salas de juego clásicas cuentan con menos jugadores; en muchos casos, se las ve en una situación de abandono.

Esta situación resulta particularmente relevante en nuestra ciudad hoy en día, luego de que se aprobara la millonaria venta del Casino Necochea. Con muchas voces en contra de la medida, la situación propone una contingencia que es necesario analizar.

La coyuntura de los casinos online en Argentina

En el país no hay una ley nacional que regule el juego, sino que esta materia está a cargo de cada provincia. Sin embargo, existe un sinfín de operadores que brindan sus servicios de apuestas en todo el territorio: se puede consultar esta guía actualizada de casinos online en Argentina para ver sus nombres y sus condiciones.

Esta situación presenta una evidente ambigüedad. Es decir, los juegos de azar en línea no están legislados, pero aun así están disponibles en todo el país. ¿Cómo saber si se trata de estafas o de operadores de apuestas serios?

Esto puede determinarse a través de las licencias de las autoridades internacionales de juego. Estas son entidades extranjeras que emiten certificados de calidad para los casinos online de todo el mundo. Sus estándares son los más altos, en función de asegurar que el juego transcurra de manera segura y sustentable. Algunos ejemplos famosos son la Autoridad de Juego de Malta, la Comisión de Juego de Curação, la Autoridad Regulatoria de Gibraltar y la Comisión de Juego del Reino Unido.

Avances en la legislación

Los casinos online suponen un negocio de una gran magnitud. Cada año mueven cifras millonarias y aumentan su número de usuarios activos. La regulación de esta actividad podría traer beneficios de dos tipos. Por un lado, permitiría minimizar el riesgo de que surgieran operadores fraudulentos; por otra parte, le daría al Estado un gran ingreso en condición de impuestos.

Por eso es que algunas administraciones ya han previsto la reglamentación del área, como las de la Ciudad y de la Provincia de Buenos Aires. De hecho, la segunda ya se ha puesto en marcha: la Lotería de la Provincia de Buenos Aires, entidad encargada de controlar los casinos, le ha otorgado una licencia al primer operador del país, Codere. Se trata de un prestigioso casino online español con una fuerte presencia en América Latina. Se espera que en el mediano plazo más operadores sean reglamentados.

Los motivos de la venta del Casino Necochea

Al contrario que los casinos online, las salas de juego tradicionales parecieran estar perdiendo protagonismo. El momento actual no ayuda: debido a la pandemia, todas las actividades relativas al entretenimiento presencial han estado cerradas durante largos meses. Esto es parte de la crisis internacional de los casinos de tierra, pero en Argentina hay otras particularidades que agravan la situación. 

Sobre todo, se trata del abandono de las instituciones que pertenecen al Estado. En algunos casos, se debe a la falta de infraestructura de los gobierno municipales o provinciales; en otras instancias, representa una política deliberada de los gobernantes. Esto quiere decir que muchas salas de juego tradicionales son dejadas a su suerte, sin apoyo, financiación ni 
mantenimiento, con la idea de especular con la propiedad y poder venderla a un actor privado.

Las situación puntual del Casino Necochea invita a la reflexión. Si bien durante décadas fue un punto de referencia para los turistas, en los últimos años se lo vio ruinoso y venido a menos. Es cierto que los casinos generan menos entusiasmo en los visitantes que en otros tiempos, pero tampoco se puede desatender la falta de compromiso de las autoridades con la institución.

El proyecto de renovación consistirá en derrumbar el viejo edificio, que es una de las construcciones más emblemáticas de la provincia (sino del país), para edificar tres torres de ochos pisos que albergarán turistas. La operación dejará unos u$s9 millones en la municipalidad, según fue aprobado en la última sesión. Entre las voces que se alzan en contra se cuenta la de 
una agrupación de 30 arquitectos que reclama por la falta de sostenibilidad del emprendimiento.